#QueSeaLey

¿Qué decir que no hayan dicho muches antes y con más elocuencia? El país está atravesando un período de cambios. Como todo cambio, cuesta. A todos nos asusta un poco lo nuevo, romper los esquemas, tomar nuevas rutas...

Cuándo creía que sabía lo que era el feminismo -pero en realidad no tenía idea- decía que "¿por qué no denominarse 'igualitarismo' o 'equidad'?". No entendía que lo busca el feminismo es el reconocimiento de la mujer como persona -wow, qué osado- y no como objeto. Busca romper todos los estereotipos de mujer=madre, mujer=objeto sexual, mujer=ama de casa, mujer=rosa/sensible y entender que una mujer tiene derecho a ser y dejar de ser lo que se proponga. Tampoco entendía que el feminismo no es el odio a los hombres sino romper sus esquemas también, dejar de decirle "maricón" al hombre que llora y demuestra sus sentimientos -porque todos los tienen, que no los dejen fluir es otro tema-. Borrar ese estigma de que si un hombre decide quedarse en su casa y cuidar de sus hijos y que sea su mujer quién trabaja y aporta el mayor sustento del hogar eso no es una deshonra. Si un hombre "ayuda" con la crianza de sus hijos y "colabora" con la limpieza de su casa no está haciendo nada más ni nada menos que lo que corresponde. Nacimos, nos nutrimos y crecimos en una sociedad machista, lamentablemente. Son pocas las personas que mantuvieron los ojos abiertos todo este tiempo. Son estas personas las que nos ayudaron a abrirlos ahora.

Los cambios generan rechazos. ¿Por qué sino hay tanto rechazo hacia el lenguaje inclusivo? Levante la mano quién en su momento no creyó que todos estos verbos derivados de internet y redes sociales eran una pavada. Decir "twitear", "googlear", "postear" era "hablar mal". Sí, yo lo pensé también. Y sin embargo más de una vez me encuentro sugiriéndole a alguien que "googlee" tal o cuál cosa. Si su nombre bien lo dice: inclusivo ¿cuál es el problema de salirnos de nuestra zona de confort para incluir a más personas cuando hablamos? Ah, dí en la tecla ¿no? Salir de la zona de comfort. Todo lo nuevo asusta. A mí me cuesta usarlo, me choca escucharlo pero entiendo la imperante necesidad de romper cada una de las cadenas que nos impone la sociedad -de la misma forma que busco escapar de una sociedad carnívora que continuamente me rechaza por ser vegetariana, de la misma forma que busco escapar de la sociedad capistalista/consumista que lo único que hace es destruir el ecosistema y nuestra salud-. Es cuestión de acostumbrarnos, una "e" cada tanto no sólo no va a lastimar nuestro tan apreciado y cambiante idioma sino que va a romper tantísimos esquemas mentales con el tiempo.

La información nos da poder. Sufrí, como muchas mujeres, del acoso callejero. Desde que tengo uso de razón. Siempre con la cabeza baja y con impotencia y miedo de saber que si reaccionaba no sabía lo que podía pasar -lamentablemente sigo con ese miedo-. Con el tiempo aprendí eso que ya sabía adentro mío, nunca fueron piropos, siquiera esos que me decían "hola hermosa" cuando pasaba caminando por al lado. Eso me lo enseñó el feminismo. Y también le enseñó a muchísimos hombres -aunque todavía quedan bastantes por aprender- que eso no es un "piropo", es acoso.

Mi vieja me enseñó de chiquita que yo podía ser lo que me propusiera, no todas tuvieron la misma suerte. También en su momento me enseñó de a poco a limpiar, a cocinar y usar algunas herramientas pero no me estaba enseñando a ser ama de casa. Me estaba enseñando que saber hacer las cosas es independizarse. No todas tuvieron esa suerte. A tantísimas mujeres les regalaron la cocina de plástico mientras que a sus hermanos les regalaban autos. Hoy, muchas de esas mujeres deciden pintar la habitación de su futura hija de violeta o amarillo, o cualquier color que no sea rosa. El rosa es un color, igual que el rojo o el marrón. Representan solamente eso que la sociedad te dijo que representa.

"Somos las hijas de las brujas que no pudieron quemar" dicen algunas. Y sí. Hoy, gracias al feminismo las mujeres empiezan a unirse, a llamarse hermanas. Digo "empiezan" porque esto recién arranca. Y fíjense qué loco. Hablo de "ellas" porque mi cabeza todavía tiene varios esquemas que romper. A mí la sociedad me mostró que una mujer que decide acostarse con muchos hombres diferentes es una puta. Yo aprendí que es una mujer que decide sobre su cuerpo. La sociedad me enseñó miles de formas para juzgar a otra mujeres con el fin de separarme de ellas, y a ellas de mí. Pero aprendí del feminismo y de la vida que siempre van a buscar separarnos, y es por eso que tenemos que estar juntas. Más que juntas, como hermanas.

Lo nuevo da miedo. Todo lo que se aleje de la costumbre será rechazado. Pero la costumbre no fue siempre la misma. Cuándo nuestros antepasados quisieron desvincularse e independizarse de España hubo quienes rechazaban la idea. Hoy día todos sabemos que estaban en lo correcto.

Hoy les senadores tienen la opción de hacernos progresar como nación. Es acá cuando podría repetir los miles de argumentos que leí a favor de la despenalización del aborto pero creo que hay suficiente información dando vueltas como para que cualquier persona que se lo proponga se informe y entienda tanto los fundamentos como la necesidad de sancionar esta ley. No voy a repetirte lo que busca la ley, googlealo, informate. Tampoco voy a decirte por qué es imperante que les senadores den un paso adelante y la sancionen. 

Si no se sanciona, no se termina acá. Hay muchos esquemas rotos que ya no vuelven atrás. Somos muchas las mujeres que nos reconocemos como hermanas y como tales vamos a seguir juntas. Somos muchas las que abrimos los ojos y las que no nos vamos a quedar de brazos cruzados. Ya aprendimos que el rosa no nos representa, que no nacimos para ser madres y amas de casa (es nuestra elección serlo o no). Aprendimos que tenemos una voz, que lo que nos gritan no son piropos, es acoso. Ya sabemos que no somos princesas sino guerreras. Ya abrimos los ojos y aprendimos a rechazar las publicidades que nos muestran como sumisas, esclavas de la limpieza y de la cocina. Ya avanzamos mucho pero sabemos que nos queda un camino por recorrer. Sea cuál sea el resultado de hoy, esto recién empieza. #QueSeaLey